Vento di terra. Vincenzo Marra. Italia. 2004
Haciendo honor a la mejor tradición del neorrealismo, Marra nos entrega un filme lleno de aciertos. Retratando la vida de una familia obrera napolitana, nos pinta un fresco de los padecimientos, y escasas alegrías, de este sector social en una de las ciudades más populosas y pobres de Italia. La lucha por la subsistencia diaria, es retratada por Marra con indudable destreza narrativa. Apoyado en un grupo de actores extraordinarios, las escenas evitan cualquier tono melodramático. Muchos de los hechos más importantes son narrados de modo sumamente original: la muerte del padre, la búsqueda de trabajo de la hermana, el maltrato en el ejército, la búsqueda de vivienda y el desalojo de la madre. Todos momentos de gran angustia, que se cuentan, en la mayoría de los casos, con gestos mínimos pero elocuentes. La desesperación por salir de la pobreza y la necesidad de encontrar un medio de vida, lleva a nuestro joven protagonista Vicenzo, a trabajar en dos puntas opuestas: primero con una banda de asaltantes y luego ingresando en el ejército. Pero conseguir un trabajo no acaba con los padecimientos. También existe la condena opuesta. Jornadas interminables, doble empleo, salarios paupérrimos, daños graves a la salud (contaminación con uranio), turnos rotativos (de los dos hermanos: ella en la Fiat y de Vicenzo en el ejército), autoempleo y autoexplotación (en el caso de la madre). Marra, expone como contrapartida positiva, la unidad del grupo familiar para sobrellevar todos los infortunios y también, en el caso de Vicenzo, la amistad, como forma de consuelo y contención.
Ver también la excelente nota sobre esta película de Fernando Pujato:
http://cinefilobar.wordpress.com/2012/12/11/1112-viento-de-tierra-de-vincenzo-marra/